Hace unas semanas, mientras miraba noticias sobre futbol, me encontré con un artículo publicado por el periódico El Confidencial. El mismo artículo decía que importantes futbolistas participaron en un partido benéfico.
En dicho partido participaron exjugadores como Fernando Hierro, Figo, Ronaldo y Zinedine Zidane entre otros.
El partido disputado en el Stade de Suisse de Berna (Suiza) enfrentaba a un equipo liderado por Ronaldo (llamado los amigos de Ronaldo) y otro equipo liderado por Zidane (también llamado los amigos de Zidane). Que incluso llegó a jugar una mujer, la brasileña Marta Viera da Silva, nombrada mejor jugadora de futbol del mundo cinco veces consecutivas por la FIFA.
Este partido benéfico se jugó para ayudar económicamente a los afectados del tifón Haiyan ocurrido en Filipinas en noviembre de 2013 donde fallecieron 6300 personas y los destrozos superaron los 3 mil millones de dólares; también quedaron 11 millones de personas damnificadas y otras muchas se quedaron sin hogar.
Dirigentes como el presidente de la UEFA Michael Platini también apoyaron este torneo.
Asistieron 18000 personas en este undécimo partido anual contra la pobreza, cuyo resultado fue de 8 goles a 6 a favor del equipo de Ronaldo con Hat-Trick del exjugador de 44 años Chapuisat y remontada incluida.
Yo creo que está bastante bien que leyendas del futbol y otros famosos participen en actos benéficos; porque ellos son los ídolos de mucha gente y el ejemplo de una buena parte de la sociedad. Si los futbolistas hacen buenos actos también sus seguidores harán lo mismo, es una manera de incentivar a la gente a que colabore con el prójimo. Sobre todo los deportistas a los que la gente joven son sus mayores seguidores. Es decir, tenemos que ayudar lo máximo posible a todo aquel que lo esté pasando mal, a ti tampoco te gustaría estar en una situación desagradable y ser ignorado, prefieres que te ayuden a superarla.
También es bonito ver como gente tan extremadamente rica como los famosos den estos ejemplos de generosidad y solidaridad con las personas mas necesitadas; es bueno compartir con los que no tienen nada.
En definitiva, que nuestros mejores futbolistas jueguen un partido para ayudar a gente desfavorecida después de un desastre como el del tifón de Filipinas es una buena noticia que podemos escuchar y un auténtico consuelo para aquella gente que lo perdió todo.