Por suerte la vida saludable y hacer deporte se ha puesto de moda; solo hay que verlo en las tiendas: donde antes había unas mallas negras y sosas ahora hay diez mil ochocientos modelos distintos de mil y un color. Antes nadie miraba las etiquetas de los productos y ahora todo el mundo sabe la cantidad de hidratos de carbono que lleva cada cosa; antes solo compraban en las tiendas ecológicas los “ipies” y ahora ha aumentado el número de tiendas y de ventas. Esta nueva “moda” al igual que todo tiene su parte buena y su parte mala. Obviamente que la gente salga a las calles a hacer ejercicio, que el punto de reunión de los jóvenes sea el polideportivo o que la gente empiece a medir lo que come es genial, pero como todo, siempre, hay una parte negativa la cual no muchos saben ver. El tema de los “personal trainer”: en este mundo pasa como en las películas descargadas por internet, muchas veces no valoramos el trabajo de los “autores” por comodidad o por ahorro. Al igual que en el cine hay un director, en el deporte hay verdaderos “personal trainer” que han estudiado y han luchado para poder enseñar cómo hacer deporte correctamente y llevar una verdadera vida saludable, ya que han estudiado para ello y no se basan solo en el “si yo de joven era todo un atleta”. Pero nosotros no los valoramos porque no lo vemos como una profesión real, es lo que has dicho, nunca irías a arreglar tu coche al médico ni a pedir la carne bien cortada a la frutería.
Veo este artículo muy necesario, porque este tipo de realidades no se ven y esta es una de ellas.